Me gustaba aquella casa
que seguía levantándose sola
a propósito del yeso y las piedras
sin pensar en otros
motivos más líricos
por ejemplo
y a pesar de que los ejemplos los puso todos mi maestro
sostener la enredadera
los trepadores insectos
las umbrías grietas donde pende un huevo de araña
levantándose sola
copiándose a ella misma
insistiendo
contra la presión atmosférica
ignorante del principio de Arquímedes
de la mierda, de los polvos rosas, del merengue,
solo el recuerdo de esos arcos
que solo darían ahora paso al fantasma
del hombre elefante
me gustaba y me gusta
aunque solo sea para incordiar
y esas alfombras verdes volantes no identificadas
imposibles a la genuflexión
y variados olores vegetales
que no están en la enciclopedia del perfume
Miguel Sanchez
2 comentarios:
Apoteótico, supimpa, fantástico,soberbio, macanudo, legal!
Víctor Barrionuevo
São Paulo, Brasil (con "s")
En tu línea, Miguel, genial. Y además nos regalas una ilustración. ¿Qué más se puede pedir para inaugurar un blog?
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